Sierra de las Quijadas

Sierra de las

Quijadas

Cautivante y magnífico, el Parque Nacional Sierra de las Quijadas combina el color y la frescura de sus acantilados y cornisas con importantes depósitos geológicos y yacimientos paleontológicos. En este ecosistema coexisten diversas especies de la flora y la fauna local que le dan vida a este imponente marco natural en el norte provincial.

Ubicado a 120 kilómetros de la ciudad de San Luis, entre los departamentos Ayacucho y Belgrano, y con una superficie superior a las 70 mil hectáreas, El Parque Nacional Sierra de las Quijadas se nutre de farallones, barrancos y graderías de un color rojizo intenso, que se puede dimensionar en todo su esplendor desde el Potrero de la Aguada, gran anfiteatro natural en el corazón de la sierra que lleva consigo casi veinticinco millones de años de historia geológica.

Este impactante entorno natural vincula los ambientes del Chaco Serrano, con sus bosquecitos de quebracho blanco y algarrobo, y del Monte de Llanuras y Mesetas, donde predominan los arbustos como las jarillas. La fauna local incluye especies como maras, guanacos, zorros grises, pecaríes de collar y el pichiciego menor, un pequeño armadillo en peligro de extinción. También la componen aves como las martinetas, el cóndor, el águila mora y el vencejo de collar.

Este paraíso natural cuenta con la distinción mundial de ser considerado Sitio Ramsar (Humedales de Importancia Internacional) Aquí se han hallado restos fósiles de dinosaurios y reptiles voladores como el curioso pterodaustro, con sus notables mandíbulas recurvadas hacia arriba.

Además, este parque nacional resulta de suma importancia para los pueblos originarios que pescaban en las lagunas de Guanacache o para los criollos que aún viven en la región manteniendo sus costumbres.